Innovación en acero inoxidable
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Publicado em 19/04/22
El inoculante es un producto que contiene una gran cantidad de bacterias que son muy beneficiosas para los cultivos. Intensifica el proceso natural de fijación biológica de nitrógeno (FBN), a través del cual las bacterias que viven en el suelo se asocian con las plantas, capturan el nitrógeno del aire y lo transforman en alimento para la planta.
Es un insumo biológico con microorganismos capaces de realizar actividades beneficiosas y necesarias para el desarrollo de las plantas. Contiene bacterias responsables de la formación de nódulos en las raíces de las plantas y se desarrolla y produce de acuerdo con los protocolos establecidos por la Red de Laboratorios para la Recomendación, Estandarización y Difusión de Tecnología de Inoculantes Microbianos de Interés Agrícola (Relare).
Al igual que cualquier otra formulación, los inoculantes deben tener una eficiencia agronómica comprobada, de acuerdo con las normas oficiales de Relare, y ser aprobados por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento. El inoculante se puede encontrar en empresas acreditadas, en instituciones de investigación estatales y en Embrapa Agrobiología.
Son productos económicos, ofrecidos en forma líquida, gel, turfa e incluso nuevas formulaciones. El inoculante en su fórmula líquida puede aplicarse a través de semillas y en surcos de siembra; mientras que el inoculante a base de turfa solo puede aplicarse a través de semillas. Para ello, el agricultor debe seguir rigurosamente las instrucciones descritas por los fabricantes en el envase del producto.
Para desarrollar el inoculante, existe un reactor presurizado, equipado con un sistema de agitación específico para esta aplicación. Estos reactores cuentan con camisa de intercambio térmico y aislamiento térmico, y pueden ser de volúmenes variados según la necesidad del cliente.